La fiesta revive la tradicional matanza del cerdo y la elaboración del mondongo, una actividad que estuvo muy arraigada en todos los hogares altoaragoneses y que todavía se mantiene en añgunos lugares. El programa de la jornada también acoge una Feria de Artesanía, que reúne a unos 90 puestos en torno a la plaza Mayor de Albelda para ofrecer productos autóctonos elaborados de forma artesanal, la mayoría vinculados al ámbito agroalimentario “que no pueden competir con las grandes producciones y aquí encuentran ese cliente”, ha dicho Miguel Gracia, quien también se refería a ellos destacando su trabajo, que sirve para que quien visita estos eventos dirija su mirada a las zonas rurales. “Casi todos ellos instalados en zonas rurales y a los que debemos apoyar en estas ferias y comprando sus productos para que puedan mantener el territorio”, ha incidido.
Organizada por la peña Lo Magré y el Ayuntamiento de la localidad, se celebra el último domingo del mes de enero y durante la jornada la población acoge a unas 5.000 personas procedentes principalmente de localidades oscenses y leridanas, aunque también los hay de otras provincias cercanas como Barcelona, Zaragoza o Valencia. Junto al Presidente de la Diputación también han disfrutado de esta jornada, que fue declarada ya en 2001 como fiesta de interés Turístico de Aragón, María Ángeles Roca, alcaldesa de Albelda, y otros ediles de poblaciones vecinas, así como el presidente de la peña Lo Magré, Pedro Gracia.
El tiempo ha acompañado con una mañana soleada en la que se han concentrado todos los actos, desde el almuerzo con chocolate con torta a los más de 1.000 kilos de carne que se han repartido a lo largo del día. Además de la escenificación de la matacía, el despiece y la posterior elaboración de los productos derivados del cerdo, todo ello de manera artesanal y con la presencia de los Mossos y Carreters de Albelda, que durante toda la jornada han ofrecido paseos en carro a los visitantes más pequeños.